Una de las tantas cosas decepcionantes de la vida, es que te enamoras de imágenes y reflejos, amas lo que deseas amar y no lo que la otra persona te ofrece para que ames, y al final, las imágenes y los reflejos desaparecen, llevándose consigo al amor y dejando simplemente una enorme sensación de patada en las bolas y el aire brutalmente enrarecido.
una enorme sensación de patada en las bolas y el aire brutalmente enrarecido.
ResponderEliminarme gusta eso! :)
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarUn vacío que te dá por la nalguita
ResponderEliminar